Paola Aillapán, del equipo Operaciones en Appcar : "Me gusta enfrentar los problemas"

Para Paola Aillapán Curivil (24), ingeniera en marketing de profesión, la Navidad de 2021 significó un nuevo comienzo. Algo parecido a un reto personal que la incentivó a probarse a sí misma, luego de años de inmadurez profesional, según cuenta.

Y es que cuando buscó práctica en la bolsa laboral de su universidad se topó con una serie de oportunidades, pero eran pocas las empresas que realmente la entusiasmaban. Hasta que apareció Appcar: “la primera semana de mi práctica me hicieron llamar a muchas personas y, como era nueva, fue tremenda experiencia. Y sin embargo aprendí, y me sirvió para entrar en confianza”, dice.

En la práctica lo hizo tan bien que su jefe le ofreció seguir trabajando luego de apenas un mes de práctica. Claramente aceptó la propuesta porque quería seguir aprendiendo, y, al poco tiempo, la ascendieron al cargo de Operation Analyst, donde se desempeña hoy.

“Antes de ejercer de lleno en el marketing, quiero entender los procesos que conllevan una mejor atención y para llegar a eso debes conocer al área de Operaciones. Me gusta mucho trabajar ahí, el ambiente que hay”, dice Paola. 

Oriunda de Santiago, pero con fuertes raíces a más de 700 kilómetros de la capital chilena: en Nueva Imperial (provincia de Cautín en la región de la Araucanía) está la mitad de su vida, porque ahí viven sus abuelos maternos. De ahí su amor y admiración por el campo y su naturaleza. Actualmente vive con sus dos padres y su polola, quien estudia hotelería y turismo, una carrera que se complementa con la suya y su curiosidad por la naturaleza.

Le hicimos un par de preguntas, porque queríamos curiosear por qué alguien que se formó en el mundo del marketing decidió trabajar en el día a día de la industria de la tecnología y movilidad.

— Hay muchas cosas en las que no me sentía buena. Cuando estaba estudiando siempre ponía en dudas mis capacidades y siempre tuve miedo de hacer las cosas mal. Cuando entré a Appcar tuve que hacer tantas cosas y me di cuenta que todo lo que significaba trabajar en equipo lo podía cumplir. Me ha servido en el ámbito personal y profesional. Me ha ayudado a confiar en mí, que sí soy una persona que puede llegar a hacer cosas que no imaginaba. Ya pasé por el tema de hablar con los clientes y no tomarse las cosas personales. 

— Sí, porque quizás mi yo de hace cinco años no habría servido para esto, hubiera reaccionado de otra manera. Me gusta enfrentar los problemas. Una vez un cliente me preguntó cuánto llevaba trabajando en la empresa y llevaba dos semanas. Sin duda: una lección de humildad para mí, y porque intenté dar la mejor respuesta posible. Eso lo hice solo porque tenía a un equipo detrás que me ayudó a sacarlo adelante.

— Súper bien, me llevo excelente. Siempre saludo enérgicamente, y ellos me preguntan qué tomo para tener tanta energía. Siempre trato de que todo sea grato porque creo que es importante que trabajemos contentos y que si tenemos un problema el trabajo no sea una carga más. Que nos sintamos bien. Y si hay días más intensos, siempre voy con la intención de que sea diferente. 

— Toda la vida he vivido en Santiago, pero la mitad de mí está en el campo. Mi vida en algún momento estará allá. Me gusta el ambiente, la naturaleza, sus sonidos. 

— Mis abuelos maternos viven a 15 kilómetros de Nueva Imperial, él tiene 87 y ella 84. Y desde chica voy todas las vacaciones. La mitad de mi familia está allá y la otra en Santiago, pero siempre los veranos son en familia. De ahí viene el amor por el campo. Ahora con la tecnología puedes estar en cualquier lado, entonces no sería difícil vivir ahí. De hecho, hemos tratado de adaptar todo para tener internet en la casa de mis abuelos. Del terreno de mis abuelos, al frente vive mi tía y por ahí tiene un terreno mi mamá. Estamos todos cerca. Estamos todos en familia.

— Escuchar música, pero sólo las sinfonías. Con Benja Norambuena (también de Appcar) conversamos de esto. También me gusta pintar mientras la escucho. No pinto maravilloso, pero sí me gusta bastante pintar cosas que me imagino. Puedo estar todo un día haciéndolo. En mi casa tengo acrílicos, pinceles, crayones, lapiceras. Siempre me llamó la atención y nunca había tenido la oportunidad de hacerlo. Y me gusta pintar paisajes: los cerros, la nieve, los arbustos, pero siempre relacionado al campo.